lunes, 21 de marzo de 2016

cobbler de frambuesas | el postre más fácil del mundo

Me enganché con este reto mensual de rainydaybites, el #rainydaybitescookbookclub.
La idea es tener los libros a disposición, y elegir recetas de ahí. Como los libros no los tengo, y cuando viaje prefiero usar el peso para props, compro cada vez menos libros.


Pero la magia de google siempre está para salvarnos, y todos los libros se promocionan por lo menos, con una receta...
Este es el caso del libro de este mes, The broad fork, de Hugh Acheson. Un libro que se propone recetas de temporada, con ingredientes nobles de temporada.


La cosa más loca del mundo, en Buenos Aires es muy difícil conseguir ingredientes de temporada que se producen en el país. En una punta o en la otra, pero acá llegan como super exclusivos. Te vas al norte, y comes quesos, dulces artesanales, papines que no te imaginas que existen.
Te vas al sur, y tenes frutos rojos a rolete, una exquisites en la gran ciudad...


De vuelta, la magia de google me llevo a descubrir que hay gente que vende frutos rojos congelados en la comodidad de su hogar, y a mano para todos.
Así, la idea que parecía frustrada, de participar en el reto iba tomando forma. Una breve pasada por la papelera a comprar una bandeja para horno descartable (el cobbler iba al #cremonafest), y ya estaba todo listo para empezar...


Y de golpe! Me dí cuenta que el último día de frío del año pasado, me había terminado la polenta!
El tiempo me jugaba en contra, así que la reemplace por almidón, tenía que hacer ese cobbler ese día en ese momento sí o sí. Ya me era un capricho a esa altura!


En la frustración de la falta de polenta, me olvide el azúcar! Por eso, cuando me avivé (a la media hora de horno), le esparcí la cucharada por arriba... y eso es lo que se ve en la foto.
Una receta llena de imprevistos, pero que salió deliciosa, es super fácil, y un postre que viste cualquier cena pipi cucu.

martes, 15 de marzo de 2016

palitos de pretzel | german soft pretzel + #cremonafest

Este fin de semana hicimos el 4to picnic gastrobloger... Quedó bautizado picnic, por aquella super tarde allá por el 2011, aunque los dos siguientes no fueron picnic. Es más, el encuentro del 2015 fue de noche, así que apenas un par de fotos para documentar y ningún post...


Pero este año volvimos al formato picnic. El mejor lejos: cada quien lleva algo casero para compartir, manteles, lonas, termos, mates, jugos, y no necesitamos mucho más.
Sigo sosteniendo que entrar a este mundo (o permanecer ya a esta altura), es un camino de ida. Y uno de los motivos principales es este: que se genera comunidad, que hay mucha gente afín, haciendo cosas parecidas, con ganas de compartir, y que no nos cruzaríamos de no ser por este medio.


Y todo el tiempo se van sumando cosas nuevas: plataformas nuevas (más usuarios y más claves para memorizar!!!!), formas de generar comunidad, y formas de participar y mantenerlas.
Una de ellas, el hashtag o numeral, hizo que este encuentro explotara en instagram.


No me voy a detener en esto, simplemente pasen por Alma Singer, que Vero, la reina y hada madrina de los blogs, hizo un perfecto resumen del numeral mágico.
Esta vez, por simple capricho y/o casualidad, el picnic gastrobloguer se termino llamando #cremonafest. Hay una larga historia detrás, que no viene al caso... Pero sí, hubo cremona entre tantas otras cosas.


Se sumaron conocidas y desconocidas, pero todas con muchas ganas de pasar una hermosa tarde de cierre de verano al sol, y con amigas virtuales.
Acá les dejo la lista, para que visiten a estas genias! Algunas ya, apenas con el picnic digerido, ya postearon su experiencia!


Ale, Alma Calma
Andre y Clau, Algo así
Dana, La jaula vacía
Feli, Dish by dish
Flor, Menos mal que soy de géminis (menos mal que Pau y yo también, sino no había #cremonafest!)
Gise, Sentidos creando juntos
Lore, Una xícara de café
Mica, Miicakes
Nati C., Natalia Caparroz ilustradora
Nati R., Nobles pensamientos
Noe, Bren y Flor, En pocas palabras
Pau, Cocina Central
Vale, Veilys mesas boutique
Vero, Alma Singer

Y finalmente, les dejo una de las recetas que compartí ese día: pretzel. Primera vez que los hago, pero definitivamente no la última.
Los pretzel, o cervecinas como los llamaba mi abuela (con toda una historia detrás), son unos de mis snacks preferidos... entre papitas, palitos y chizitos, definitivamente me quedo con los pretzel... Los que crecieron en los '80, seguramente se acuerdan de los actualmente reciclados kesbun y los palitos de la misma marca, llenos de granitos de sal gruesa, un snack extrañado como pocos (dale Bun, si pudiste relanzar las kesbun, que esperas para los buntzel?).

lunes, 29 de febrero de 2016

un budín distinto | pomelo, oliva y chocolate

El mundo de las recetas en blogs es interminable.
Además de que continuamente se están generando nuevas formas de conexión.
Las redes sociales no paran de surgir o reinventarse, y siempre hay algo para hacer en alguna de ellas.


Ahora el hit es instagram: sencilla, visual, rápida y donde se puede participar mucho más fácil que en otras...
Para la cocina es ideal: con teléfonos que cada vez sacan mejores fotos, más un montón de filtros cero profesionales pero que hacen a una foto bonita, Instagram es LA red donde seguir foodbloggers y foddies en general.


Ahí también se generan redes y retos, y ves todos los días algo nuevo o conoces a alguien nuevo.
A través de IG es como llegué a Not without salt, un blog con unas recetas geniales!
Resulta que otra instagramera, rainydaybites, tiene un "club de libros de cocina".


Todos los meses elige un libro, y durante todo ese mes podes hacer una (o varias) receta de ese libro y subirla con #rainydaybitescookbookclub, y así te empezas a cruzar con un montón de cocinas nuevas y maravillosas.
En principio, esta vez, me hice fanática del blog de Ashley, la autora del libro elegido para febrero.
Elegí una de las recetas de su libro que está colgada en su blog, porque obviamente, no conseguí el libro en Buenos Aires.


La verdad, que no podría haber elegido una mejor receta! Muy original, un budín cítrico, pero diferente... dejamos descansar un poco al limón, y esta vez tocó budín de pomelo!
Maravilloso! Además conseguí unos pomelos rubí gigantes y rojos intensos, bien ricos y jugosos.
La combinación de pomelo, chocolate y aceite de oliva me encantó.


La simpleza de la preparación y el budín final me hacen querer suponer que cambiando el poco líquido que lleva por cualquier otro (limón, naranja, mandarina, leche+vainilla), daría con una simple mezcla variedad de deliciosos budines... ya lo voy a probar.


Si tienen instagram, tienen que seguir a Deborah y a Ashley, que suben unas fotos hermosas. Y si no, visitar Not without salt, que van a tener una infinidad de recetas para probar!

miércoles, 17 de febrero de 2016

lemon pie | un clásico olvidado

Uno de los postres que hacía seguido, además de la torta de cajita y estas galletitas, era el lemon pie. La versión leche condensada y masa de galletitas trituradas. Una mezcla de key lime pie y cheesecake.


Después, en una revista que coleccionaba y ya no existe más, encontré esta receta. Y ajustándola a mis gustos, se transformo en el clásico lemon pie del recetario...
Ahora que veo que el blog cumplió 7 años, y la receta no está publicada, me doy cuenta el tiempo que hace que no lo hago!


Pero, más vale tarde que nunca, la volví a hacer, volvió a ser un éxito, y ahora es momento de compartirla acá.
Voy a pasar más abajo la receta tal cual la hago cuando hago un lemon pie. Esta vez, tenía masa de sobra de galletitas de manteca para una ocasión especial, así que usé esa masa como base, aunque es mejor la de la receta, ya que es menos dulce.


Los huevos de la masa/relleno/merengue están ajustados para que no sobren ni claras ni yemas. Como la masa ya estaba lista, los huevos sufrieron alteraciones, pero no recuerdo cuales! Pero se que no me sobraron ni claras ni yemas... misterio...


También tenía freezados cubitos de jugo de limón de quinta, unos 5 o 6... que ni por casualidad llegaban a la cantidad de líquido de la receta. Metí el dedo en un cubito, me lo chupe, y... oh mi dios! que ácido y con gusto a limón estaba! Así que complete con agua...


Siempre hay excepciones a la regla... La pastelería es pura precisión, pero tampoco es para tanto... La receta de acá abajo sale increíble porque está más que probada... pero este lemon pie de las fotos, con todas sus alteraciones, salió perfecto también... así que no hay que desesperar tanto con lo milimétrico de la pastelería, nunca es para tanto.


jueves, 11 de febrero de 2016

frutas + hierbas + espumante | para brindar en san valentín

Este fin de año festejamos con champagne... Siempre festejamos con champagne, pero este año con cockteles con champagne.


Siempre es divertido ponerse a mezclar frutas y hierbas, como estas galletitas o esta torta. Hacen combinaciones originales, y si le sumamos el espumante, muy refrescantes.


Como fue una idea de último minuto, en casa mezclamos lo que conseguimos y nos pareció más apropiado.


Terminaron saliendo dos versiones totalmente diferentes, pero tan ricas, que fue difícil decidirse por una.


Son super vistosos y alegres para brindar, una idea genial para festejar San Valentín también, no?


Son coloridos, dulces, aromáticos y, según la onda que le pongas, muy románticos.